El Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador,
descartó que su administración vaya a demandar al ex gobernador de Tabasco
Arturo Núñez Jiménez, por el presunto desvío de recursos de las finanzas
estatales.
En su tradicional conferencia de prensa mañanera, el
mandatario recalcó que el gobierno federal no ejercerá acción penal
contra Núñez Jiménez; empero, sostuvo que “si el pueblo me lo pide, procederemos”.
Al respecto López Obrador fue enfático al remarcar que "basta
de chivos expiatorios, si se tiene que castigar a los que han actuado mal,
tenemos que empezar por los ex presidentes".
Comentó que “sí sería circo, espectáculo, pero en vez de
avanzar hasta podríamos quedarnos anclados, empantanados, yo quiero seguir viendo
hacia adelante”.
Yo en este caso –abundó-- considero que lo más importante es
poner punto final a todo este periodo desastroso de política neoliberal porque
a lo mejor no alcanzarían las cárceles, juzgados, y no nos ayudaría a regenerar
la vida pública.
Dijo sin embargo que insistirá al Congreso de la Unión para
que se quiten los fueros y el presidente pueda ser juzgado “como cualquier
ciudadano”.
Por último, recalcó que “no voy a sudar calenturas ajenas,
tengo un compromiso con el pueblo de México, el único por el que metería las
manos al fuego sería por Jesús por ser menor de edad”.